"Muchos estudiantes no creen en sus capacidades"

Enrique González

Las calificaciones de México en matemáticas llevan años entre las peores a escala internacional.

Entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE), el país ocupa los últimos lugares en la disciplina cuya paternidad se le atribuye a Pitágoras. Según datos de 2013, 55 por ciento de los alumnos mexicanos de 15 años no tienen el nivel de competencias básico; son incapaces de llevar a cabo los cálculos aritméticos básicos para su vida cotidiana.

El "coco" de la educación nacional es precisamente el área de especialización de Karla Puga (foto) (Zapotlán El Grande, 1970), catedrática del Instituto Tecnológico de Ciudad Guzmán y egresada del Doctorado Interinstitucional en Educación con sede en el ITESO, el cual forma parte del Programa Nacional de Posgrados de Calidad del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y que cuenta con la participación de la Universidad Jesuita de Guadalajara y la Universidad Iberoamericana campus Puebla, Ciudad de México y León.

Hace falta mucho trabajo para revertir el mal desempeño de México frente a las matemáticas. Puga estudió simultáneamente la carrera de Ingeniería Electrónica en Instrumentación en el Instituto Tecnológico de Ciudad Guzmán (ITCG) y la de Enseñanza de las Matemáticas en la Universidad de Guadalajara (UdeG), y posteriormente la Maestría en Ciencias en Enseñanza de las Matemáticas, también en la UdeG.

En esta entrevista comparte su experiencia en el doctorado del ITESO y habla sobre los aspectos que deben atenderse para apuntalar un área que resulta fundamental en el desarrollo tecnológico, social y económico de los países.

¿Qué encontraste en el doctorado del ITESO para inscribirte?

Consulté el currículum de la planta docente que integra el doctorado y la verdad quedé sorprendida de la brillante trayectoria de cada uno de los doctores que trabajan en este programa. Platiqué con algunos egresados y los comentarios fueron muy positivos, así que sin pensarlo más decidí solicitar la evaluación correspondiente para ser considerada.

¿Cómo evaluarías al doctorado?

Cada semestre fue intenso y muy fructífero. Los doctores con quienes trabajamos mis compañeros y yo fueron personas especialistas en el área que abordaban y nos orientaron para ir trazando nuestra formación como investigadores. Compartieron su amplia experiencia sin límites y en todo momento estuvieron dispuestos a atender nuestras solicitudes.

¿Cuál fue tu proyecto de investigación doctoral y qué tan avanzado lo tienes?

Está inserto en el terreno de la matemática educativa. El objetivo de la investigación fue analizar, desde la perspectiva teórica de la epistemología genética, las estructuras mentales que desarrolla un estudiante universitario para comprender y apropiarse del concepto de la ‘Integral'. Se utilizó el método de expiración crítica, cuyas técnicas de recolección de datos fueron la observación no participante y la entrevista en profundidad. Se reporta la descripción de las etapas por las que transitaron seis estudiantes en la construcción de un esquema mental para la apropiación del concepto de la ‘Integral' desde registros de representación geométricos, recurriendo a la acumulación de áreas y al sentido geométrico de la derivada como una alternativa para recuperar la gráfica de una función primitiva.

Escribes artículos acerca de la enseñanza de las matemáticas a nivel superior. ¿En dónde los has publicado y en qué otras actividades académicas has participado?

He participado en calidad de ponente en diferentes foros nacionales y en el extranjero en los que he presentado resultados de investigaciones y propuestas en torno a la enseñanza y aprendizaje de las matemáticas con el uso de la tecnología. He sido invitada a impartir talleres y cursos de actualización docente en distintas instituciones y participado en la elaboración de capítulos de algunos libros. Junto con otros compañeros del Tecnológico de Ciudad Guzmán elaboré un libro titulado Funciones, en donde abordamos teóricamente este concepto que es medular en la formación de un ingeniero. Además, se incluyeron estrategias didácticas y materiales de apoyo para promover el trabajo independiente en los estudiantes. Ha sido un material muy útil para nosotros en el Tecnológico. 

Las matemáticas son uno de los peores rubros de la educación mexicana, según evaluaciones nacionales e internacionales. ¿Por qué nos cuestan tanto?

Las matemáticas son una disciplina que causa dolores de cabeza en las escuelas mexicanas. Al parecer, según reportes oficiales, en México el nivel de matemáticas en los diferentes niveles escolares no ha sido del todo satisfactorio, ya que es la disciplina en la que se reportan mayores índices de reprobación y/o deserción. Antagónicamente en México tenemos matemáticos y escuelas de matemáticas de lo mejor mundialmente hablando. En foros internacionales relacionados con las matemáticas es evidente la presencia de los matemáticos mexicanos por su brillante trayectoria y aportes significativos en esta área.

Pero entonces, ¿qué sucede en el aula? ¿Por qué tal rechazo?

Desafortunadamente, el problema en el aprendizaje y la enseñanza  de las matemáticas es multifactorial, desde aspectos sociales tradicionales que dicen que es la disciplina "difícil", hasta problemas académicos en la formación del docente, desde luego pasando por las políticas educativas. Los seres humanos promedio nacen con las capacidades de construir y aprender matemáticas. Sin embargo, muchos estudiantes no lo saben, no creen en sus capacidades.

Considero que el problema del rechazo de las matemáticas inicia en los niveles básicos. Con los niños de cuarto año de primaria esto empieza a manifestarse, y en la medida que avanzan a otros niveles escolares, la situación se agudiza hasta que se sale de control. ¡Imagina el rechazo que se enfrenta en el nivel superior!

Se requieren dos elementos importantes para desempeñar un buen papel en el aula: que el profesor domine contenidos y que posea estrategias que le permitan crear escenarios propicios para el aprendizaje de la disciplina.

¿Qué haces en el Instituto Tecnológico de Ciudad Guzmán?

Lo que más me apasiona es la docencia. Trabajo únicamente en el área de matemáticas con los estudiantes de maestría y licenciatura. Pertenezco a la academia de Ciencias Básicas, integrada por 24 maestros de física, matemáticas y química.

Algunos profesores de matemáticas formamos, desde hace varios años, un equipo de trabajo que ahora registramos ante PROMEP como Cuerpo Académico del cual soy representante. Las actividades que desarrollamos en este grupo son diversas, por mencionar algunas te comento que año con año, en conjunto con los compañeros de la academia llevamos a cabo el Seminario Nacional sobre la Enseñanza y el Aprendizaje de las Matemáticas con Tecnología, el próximo año vamos por la emisión número 12. El producto de este evento ha sido un libro en el que se recopila cada propuesta que los participantes presentan. También ofrecemos talleres de actualización docente y abrimos un espacio en el que los estudiantes pueden participar.  

¿Cuáles son tus planes profesionales inmediatos?

A partir de mi reincorporación al ITCG, después del doctorado, se me ha confiado la Jefatura de Proyectos de Investigación en el área de Ciencias Básicas. Actualmente desarrollamos un proyecto relacionado con la estandarización del nivel académico en matemáticas de los estudiantes de nuevo ingreso para su primer curso de cálculo. Uno de los productos de este proyecto será el libro para el curso de "Cálculo diferencial" y las estrategias didácticas y de estudio que se sugieren a los estudiantes y maestros que impartan la materia.